La Ruta de los Borja en la Costera
La Costera presume de ser la cuna de la familia Borja, una de las más poderosas del Renacimiento. La familia logró fama universal con dos papas, Alfonso de Borja (Calixto III, 1456-1458) y su sobrino Rodrigo de Borja (Alejandro VI, 1492-1503). Una de las maneras más sugerentes de visitar la Costera es recorrer los lugares que tuvieron relación con la célebre familia.
La Ruta de los Borja en la Costera
Siguiendo la ruta de los Borja conocerás la Costera desde una perspectiva diferente, una en la que te ayudaremos a ver nuestras tierras y nuestro patrimonio desde la perspectiva de un linaje que brilló y quiso dominar el mundo.
Las raíces de la familia
Los Borja fueron una más de las familias que llegaron con la conquista cristiana, linajes que a cambio de conquistar y colonizar recibían propiedades a sus dominios. En el siglo XIII encontramos caballeros con el apellido Borja en los territorios que rodean Xàtiva.
LA TORRE DE LOS BORJA
Hasta mediados del siglo XIV, los Borja fueron una familia más de caballeros. Pero a partir de la Guerra de la Unión, el ejercicio de magistraturas municipales y la adquisición de señoríos les permite reforzar su posición económica. Sus dominios comprendían un extenso territorio salpicado de alquerías señoriales, una de las cuales, la Torreta, pertenecía a los Borja. Actualmente en el término de Canals, es conocida como la Torre de los Borja, donde nació el papa Calixto III.
EL PALACIO GÓTICO
El palacio de estilo gótico que rodeaba a la torre es del siglo XIV y aprovechó los restos de la muralla y la torre musulmana que permanecía abandonada. En 1506 fue vendida por los Borja, junto al señorío, al ayuntamiento de Xàtiva. Sabemos que en 1758 fue restaurada y en 1847 vendida a particulares que la aprovecharon para sus viviendas. Finalmente en 1995 fue adquirida y restaurada por el ayuntamiento de Canals.
ORATORIO DEL PALACIO BORJA
Frente a la torre y formando parte del complejo del antiguo palacio encontramos la iglesia de la Torre o de la Santa Cruz, antiguo oratorio del palacio. Fue construido en el siglo XIV en estilo gótico de conquista y con una única nave de planta cuadrangular. Está edificada con muros de piedra y mortero y cubierta a cuatro aguas. En su restauración se recuperaron pinturas murales de gran valor.
LAS PINTURAS DEL ORATORIO
Representan las figuras de José de Nazaret con el Niño, de Sant Vicent Ferrer con Calixto III de niño y de San Francisco de Borja, con inscripciones alusivas, en castellano y valenciano de la época. Las pinturas son de estilo barroco, aunque tiene yuxtaposiciones renacentistas como consecuencia de las intervenciones realizadas en 1721.
Xàtiva, Capital Borja
A pesar de que ya hemos visto que las dos ramas de Borja tenían relación con Canals y la Torre, fue en Xàtiva donde este linaje tenía su sede principal. Los Gil de Borja, como eran conocidos, formaban parte de la pequeña nobleza de Xàtiva, herederos de los caballeros de conquista que habían llegado con Jaume I a la ciudad. Disfrutaron de un poder creciente en la ciudad por su papel político, por sus matrimonios con otras familias nobles como los Fenollet o los Escribano y también por su relación con las casas nobles de más renombre como los Condes de Urgell.
CASA NATALICIA DE ALEJANDRO VI
En la plaza de Alejandro VI, se encuentra la casa donde vivía la célebre familia en 1378. Aquí nació Rodrigo de Borja, futuro papa Alejandro VI, como recuerda una placa en la fachada. La casa perteneció a la familia durante generaciones posteriores y se tiene constancia de que a mediados del siglo XV fue reformada.
IGLESIA DE SANT FRANCESC
A finales del siglo XIV los Borja tenían una capilla funeraria en esta iglesia, que por su ubicación en la zona aristocrática de la calle Moncada, se convirtió en panteón de gran parte de la nobleza. Fueron enterrados Catalina de Borja, hermana de Calixto III, los abuelos de Rodrigo de Borja y otros parientes. El 1470 los restos fueron trasladados a la Colegiata.
LA CAPILLA DE SANTA ANNA
El 1444 Alfonso de Borja, que ya es cardenal, emprende la construcción de la Capilla de Santa Anna en la Seu de Xàtiva. Desgraciadamente esta capilla fue destruida por reformas posteriores. Finalizada en 1452 el cardenal Borja hace trasladar allá los restos de sus antepasados para usarla como capilla mortuoria familiar. A pesar de que la capilla desapareció en las sucesivas reformas de La Seu, todavía se conserva el Retablo de Santa Anna.
RETABLO DE SANTA ANNA
El cardenal Alfonso de Borja encargó a Pere Reixach en 1452 un retablo para la capilla de santa Anna, protectora de la Familia Borja. En las cinco tablas preservadas se representa a Santa Anna, San Agustín y San Ildefonso, el bautismo de San Agustín y la imposición de la Casulla a San Ildefonso por la Virgen María. En la tabla de San Idelfonso se representa un magnífico retrato del cardenal orante, tradición que se generaliza en estas fechas.
Territorio Borja
El poder creciente de los Borja les permitió extender sus señoríos por la comarca. Anna, Navarrés y Chella entraron en la órbita de la familia, a pesar de que la división por herencias y la continua compraventa de títulos por parte de la nobleza causó que este Territorio Borja no fuera homogéneo y continuo en el tiempo. Más allá de la comarca y los territorios vecinos, los Borja consiguieron señoríos en Llombai, Albalat de la Ribera, Turís y, sobre todo, al Ducado de Gandía. Fuera del reino de València, los Borja, fruto de su papel político internacional, gozaban de tierras en Italia, Francia y Castilla.
LA LLOSA DE RANES Y LOS BORJA
Otro pueblo de la Costera con el que los Borja mantuvieron relación es la Llosa de Ranes. No en balde, allí edificaron la ermita de Santa Anna. Situada en la cumbre del cerro del mismo nombre, ofrece vistas extraordinarias de la Costera, la Canal de Navarrés y la Ribera. Con la consolidación del dominio cristiano se reconvirtió en una ermita primitiva. No es de extrañar este cambio de uso atendiendo a que una de las funciones de los ermitaños era avisar de las tormentas que se acercaban y otros peligros como posibles invasiones o incendios.
LA ERMITA DE SANTA ANNA
Edificio gótico de mediados de siglo XV, enclave del término de Xàtiva, situado en la cumbre de la montaña de Santa Anna. El interior de una sola nave consta de tres tramos más el presbiterio, todo cubierto por vuelta de crucería. En el primer tramo, la clave de vuelta contiene las armas de un eclesiástico de dignidad menor de la familia Borja-Oms (la rama del papa Alejandro VI). Se han perdido los edificios anexos que tenía la ermita como por ejemplo la vivienda del ermitaño o las cuadras donde se guardaban los animales.
EL PALMO DE DIOS
Tenéis que creer y pensar, y pensar y creer que hace muchos y muchos años la actual cumbre de Santa Anna y la cumbre del Puig eran parte de una misma sierra. Esta sierra formaba una poderosa muralla de piedra viva, escarpada y agreste, en la cima de la cual ya había las dos ermitas que todavía hoy podemos contemplar. Estas dos ermitas estaban situadas una frente a la otra, separadas tan solo por una explanada polvorienta. Leyenda completa
Calixte III. Alfonso de Borja
Canals, 31.XII.1378 – Roma, 6.VIII.1458. Jurista y Papa.
Hijo de Doménec y Francina, primogénito de su familia tuvo cuatro hermanas: Isabel, Joana, Catalina y Francisca. Estudió en Xàtiva y Lleida donde se doctoró en derecho canónico (1411) y civil (1416). Desde muy joven participó en la administración real, así en 1408 ya asesoraba al alcalde de Lleida al mismo tiempo que iba subiendo en el escalafón eclesiástico. En el 1417 se incorpora a la cancillería real de Alfonso el Magnánimo y pasa a la corte donde llega a ser consejero real, regente de la cancillería y miembro permanente del Consejo Real Supremo. En 1420 acompaña al rey en Italia y a cambio de sus servicios va obteniendo nuevas dignidads eclesiásticas, culminando con la consecución del arzobispado de València en 1429. Este título lo recibió en premio por su papel en la resolución del Cisma de Occidente y la reintegración definitiva de los papas de Peñíscola a la obediencia de Roma.
Alejandro VI. Rodrigo de Borja
Xàtiva, c. 1431 – Roma, 18.VIII.1503. Papa.
Rodrigo nació en una familia de la nobleza setabense fruto del matrimonio de Jofré de Borja e Isabel de Borja (hermana de Alfonso de Borja/Calixto III). Fue el tercero de cinco hermanos. En 1437 después de la muerte de su padre, la familia se trasladó a València para vivir con su tío Alfonso que ya era arzobispo de la ciudad. Con su poderoso apoyo inició una rápida carrera eclesiástica que le dio cargos en València y Lleida. En 1449 acude a Roma llamado por su tío, que ya es cardenal, donde fue educado por el humanista Gaspar de Verona hasta que marchó a Bolonia a estudiar derecho y donde se doctora en 1456.
La huella de los Borja
La familia Borja perduró en el tiempo y se expandió por los estados de la península ibérica e italiana, Francia y las colonias americanas. En algunos pueblos de la Costera todavía permanece el apellido Borja, sobre todo en Montesa. No sabemos si estas personas tienen relación con el famoso linaje de los Borja, pero nos gusta pensar que sí. En todo caso, la huella de los Borja continuará en nuestras tierras entre otras figuras destacadas de nuestra historia.
DOS HERMANOS BORJA Y LOS CASTILLOS DE LA COSTERA
Los hermanos Galcerán y Diego de Borja fueron destinados por sus padres a carreras religiosas, el primero como Fraile-Caballero de la Orden de Montesa -donde llegó a ser Maestro- y el segundo como clérigo. Esto no fue obstáculo para unas agitadas vidas que los llevaron a asesinar a un rival político, Diego de Aragón, hijo natural del Duque de Segorbe. Diego de Borja fue finalmente apresado en el castillo de Xàtiva y decapitado en 1562. Años después su hermano Galcerán fue condenado a pasar diez años recluido en el castillo de Montesa.
SAN FRANCISCO DE BORJA, EL TERCER PAPA (NEGRO)
Después de una vida como noble Marqués de Llombai y Duque de Gandía, Francisco de Borja (1510-1572) ingresó en la orden de los Jesuitas. Quizás huía del turbio panorama político de la época en que sus hermanos Galcerán, Diego y Felipe continuaron participando de forma más activa. El 1565 fue nombrado Superior General de esta orden, un cargo con tanto poder que es conocido también como Papa Negro, por el hábito negro que visten los jesuitas. Un siglo después de su muerte fue canonizado el 1671.
LOS BORJA Y EL RENACIMIENTO
Los papas Borja impulsaron la introducción del renacimiento italiano en Valencia al encomendar a Paolo di San Leocadio y Francesco Pagano pintar la bóveda de la Catedral de Valencia. Como cardenales y papas fueron también unos grandes mecenas que consolidaron las carreras de artistas como Leonardo da Vinci, Miguel Àngel, el Bosco o Tiziano.
DOS BORJA QUE NUNCA PISARON LA COSTERA
En el Palacio de l’Ardiaca de la Colegiata, sobre la noble puerta adovelada, permanece el escudo de Calixto III y otros dos escudos de la rama Borja-Oms, que podrían pertenecer a César Borja, aunque no se tiene constancia del hecho de que César Borja visitara nunca la Costera. Lo mismo se puede decir de su conocida hermana Lucrécia.