Turismo en la Costera: Tesoros de interior

El Periódico de Aquí – LOS CASCOS ANTIGUOS DE SUS MUNICIPIOS NOS OFRECEN LAS HUELLAS DE SU PASADO

En la Costera caminos e historias se deshacen en sendas y leyendas. El contraste entre la riqueza natural y patrimonial resulta imposible de abarcar con una sola mirada.
Un relieve de montañas y valles donde resuena un eco milenario; una sinfonía de voces que nos conecta con raíces ancestrales.
Sus tesoros de interior invitan a detenerse en el viaje y recorrer sin prisas esta tierra de transición entre el verde de la huerta y los ocres del secano. La comarca nos ofrece una historia que revive el pasado y numerosos rincones que visitar: el encanto de sus poblaciones, su cultura y
su impresionante patrimonio artístico y natural.
Cada ruta será un descubrimiento y cada parada una experiencia memorable. Un paseo por la trama urbana del casco antiguo de los pueblos nos ofrece las huellas de
su pasado, como edificios históricos y elementos arquitectónicos de otros tiempos, en un recorrido que va desde la Edad Media hasta nuestros días.
Además cuenta con importantes yacimientos arqueológicos que han sacado a la luz el hábitat de los neandertales (la Cova Negra), poblados de la Edad del Bronce e ibéricos
(l’Altet de Palau en la Font de la Figuera y la Bastida de les Alcusses en Moixent) y construcciones andalusíes. Su situación geográfica, asentada en territorio fronterizo y paso natural a Castilla desde la costa, favoreció la construcción de castillos y fortalezas (Garamoixent, Moixent, Vallada, Montesa y Xàtiva).

PATRIMONIO
Conserva una de las primeras ermitas cristianas (Sant Feliu de Xàtiva), la obra de magníficos pintores medievales y renacentistas (Maestro de Xàtiva, Artés y Borbotó, Nicolau Falcó, Miquel Esteve, Maestro de Alzira, Joan de Joanes, Gaspar Requena, Nicolau Borràs) o la chimenea industrial de ladrillo más alta de la Comunidad Valenciana.
La Costera es también cuna de los Borja, la familia que desde la nada consiguió en tan solo dos generaciones el máximo poder del mundo europeo del siglo XV. Canals y Xàtiva atesoran edificios y obras relacionados con este linaje. Constituye una región de gran riqueza medioambiental y ecológica, con paisajes de montaña, ribera y huerta, donde disfrutar de vistas espectaculares y la tranquilidad de parajes naturales de hermoso cromatismo y fragancias que cambian con cada estación del año. Ofrece un entorno al aire libre ideal para realizar diferentes tipos de actividades y excursiones en plena naturaleza.
La orografía permite desde un agradable paseo por la naturaleza hasta practicar senderismo y BTT, espeleología o escalada.
Todo sin olvidar la pelota valenciana, deporte con larga tradición y popularidad en la comarca que ha dado grandes jugadores como Paco Cabanes “El Genovés”.
En la población del pilotari se sitúa el Museu de la Pilota, espacio museográfico con un trinquete anexo, dedicado a la historia y las modalidades de este deporte valenciano.
Por lo que respecta al patrimonio inmaterial, el carácter festivo de los valencianos se manifiesta en la Costera de manera especial. Conviven las fiestas de moros y cristianos celebradas en las poblaciones de poniente con las fallas de la zona oriental. Encontramos una mezcolanza de fiestas religiosas, generalmente patronales, con las
profanas, algunas de las cuales celebraban en origen los cambios estacionales y ciclos agrícolas. Todas siempre aderezadas con la música de las bandas. Son de interés turístico especial las fiestas de fuego, las ferias, la procesión del Corpus y las danzas.
En gastronomía el arroz es el ingrediente principal, aunque su cultivo desapareció de la comarca hace más de medio siglo. Destaca especialmente el arròs al forn, y también la paella, ambos platos elaborados en diversas modalidades. Capítulo aparte merecen el puchero y el gazpacho. Entre los dulces y postres imperan el arnadí, la monjàvena, la fogassa y
variedad de pastas. Con una cocina basada en productos de proximidad y elaboración propia, la oferta en restauración es numerosa y variada.
En alojamiento, el viajero encontrará una gama amplia de servicios hoteleros, desde establecimientos de lujo hasta campings.
La Costera se caracteriza por su producción agroalimentaria de carácter tradicional y sostenible, y al degustar sus productos saboreamos la sustancia primaria de la comarca. Los cultivos históricos y la transformación de base tradicional proporcionan unos alimentos de gran calidad: quesos, ajos tiernos o aceites. Los vinos de Els Alforins, con bodegas históricas y tecnología actual, ofrecen al visitante degustaciones e itinerarios por las modernas instalaciones vitivinícolas.
Es además un territorio de museos. La Costera ofrece un conjunto amplio de espacios expositivos dedicados, especialmente, a las bellas artes, la arqueología o la etnología.
También encontraremos algunos de carácter temático centrados en el mundo de las fiestas como las fallas o el Corpus.
Todo esto y mucho más se puede disfrutar en la comarca de La Costera. Y para preparar el viaje i la visita es imprescindible la página web https://turismelacostera.com/